OBESOGENOS, cuando hasta respirar te engorda

Has escuchado o incluso has dicho "YO ENGORDO HASTA CUANDO RESPIRO", a esta expresión un tanto cómica e incluso de resignación  la ciencia cada vez le va dando un poco más de sentido. Lo que sucede es que recientes estudios han concluido que a través del aire se transportan sustancias que provocan alteraciones hormonales y podrían influir en la ganancia de peso, se les ha llamado sustancias obesógenas y básicamente son disruptores a nivel del sistema endocrino.

El estudio fue realizado por la Universidad de Stirling en Escocia y publicado por  The National Institute of Enviromental Helath Sciences yy realizado por la Universidad de Stirling, este estudio concluyó que los obesógenos sustancias que se encuentran al aire libre alteran la función del sistema endocrino, el encargado de las regulaciones hormonales, y hacen que el metabolismo se vuelva más lento.

Pero, ¿Como es que afectan?

• Pueden cambiar la forma en que se desarrollan las células, lo que significa que pueden aumentar la capacidad de almacenamiento de grasa o la cantidad de células grasas.
• Los obesógenos pueden hacer que sea más difícil mantener un peso saludable, cambiando la forma en que el cuerpo regula las sensaciones de hambre y saciedad, o aumentando los efectos de las dietas altas en grasas y altas en azúcar.
• Sin embargo, es importante aclarar que los obesógenos no provocan directamente ese aumento de peso. Su función es potenciar la sensibilidad de nuestro cuerpo ante esa tendencia, especialmente durante los primeros años de vida. Tal y como explica Sanitas, compañía aseguradora y proveedora de servicios de salud, su modus operandi se basa en tres procedimientos igual de problemáticos para el ser humano:

¿Donde se encuentran?

• En sustancias como el bisfenol A, se utiliza mucho en productos industriales y de consumo como, por ejemplo, los envases de plástico. Un objeto de uso diario que también incluye ftalatos en su composición, además de en juguetes, detergentes y productos de cosmética, higiene personal y limpieza del hogar. “Se considera que la exposición a niveles inadecuados y en momentos del desarrollo, sobre todo en la etapa fetal y la infancia, influyen en la obesidad y la diabetes”.
  Los parabenos, muy presentes en los productos de cuidado personal, también forman parte de este grupo. Se trata de una sustancia química con propiedades similares a los estrógenos, una hormona asociada al aumento de peso. Los obesógenos cierran el círculo con otras dos sustancias igual de perjudiciales: el tributilestaño, un agente contaminante que se emplea en los sistemas de conducción de agua o como fungicida de los alimentos; y los pesticidas organoclorados que, a pesar de haber sido prohibidos todavía se detectan en la población, encuentran su peor versión en los alimentos ricos en grasas animales.

Los estudios continuan pero como se puede presuponer mucho de lo sintético y ajeno a los componentes naturales de nuestro sistema de alguna u otra manera inciden o afectan nuestras funciones y capacidades sistémicas.

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